8. Propósitos para 2021

 8. Propósitos para 2021

¡Hola, ratillas!

Entre cenas, celebraciones, videollamadas y TikTok, este (convulso) año ya se está despidiendo. Con el Sorteo del Gordo y las vacaciones de los niños, ya podemos ir dándolo por acabado (lo de perdido ya depende de cada uno). 

Entre celebraciones, compras y reencuentros, un ratilla de pro seguro que saca un momento para hacerse una lista de propósitos para 2021. Y estoy segura que entre todos estos, alguno es de los tuyos:

  1. Dejar de fumar: Te lo habrá dicho ya el médico, tu pareja, tus padres o tus hijos, pero si no eres tú el que quiere hacerlo, sáltatelo. Eso sí, antes piensa que, aparte de tus pulmones y tu salud en general, el primero en agradecerlo va a ser tu bolsillo. ¿Por qué no te compras una hucha cerdito, y vas metiendo en ella lo que te gastarías en tabaco, mecheros, ceniceros…? Al cabo de unos meses te puedes sorprender de lo que has ahorrado. Puede ser la diferencia entre tener y desear… esa moto, ese viaje, esos zapatos que siempre miras en el escaparate…


  1. Ponerte a dieta. Ufff. Querido hígado, este es el mes del que te hablé. ¿Quién piensa en “recortes” en el mes de los excesos? Planifícalo, y come más productos frescos en casa los días de diario. No te pierdas las celebraciones, pero altérnalas con días “detox”. El 26 de diciembre no tienes obligación de comer turrón, por ejemplo. Y ya, pasado Reyes, continúa con la rutina de los no festivos. A principio de año hay muchas verduras de invierno como la lombarda, la coliflor o las acelgas, que dan color a tus platos, y calientes sientan muy bien con el frío. También es la mejor época para naranjas y mandarinas. Y por tu propio motivo: que te valgan los pantalones de campana que llevan diez años confinados en tu armario, poder seguir comprando ropa en la planta joven, competir en el campeonato de judo con gente de menos peso, o practicar tu deporte favorito sin que te duelan las rodillas. 


  1. Hacer ejercicio. Nos pasamos el día sentados, y no encontramos un rato para movernos un poco. Pasear por la misma calle una y otra vez no nos motiva. Y están las cosas como para apuntarse a una actividad dirigida (de pago), o ir al gimnasio. Y si ibas, pero lo has dejado, y lo sigues pagando, date de baja. Entrena en casa. Con un canal de Youtube y una esterilla tienes de sobra. Como nadie te mira, no te sientas obligado a llevar tu equipación a la última, ni a cambiar cada día de “outfit”. Hay canales de todo: zumba, yoga, Pilates, cardio, y lo que se te ocurra. Y si tienes una Wi en el trastero, ¡rescátala! Una sesión de zumba o de kickboxing con los amigos puede ser un plan estupendo para una tarde de domingo.


  1. Hacer un curso. Como ni el ratilla más de pro lo sabe todo, de vez en cuando tenemos que actualizar nuestros conocimientos. O ampliarlos. O desarrollar habilidades que van a ser útiles en estos tiempos que cambian a un ritmo vertiginoso. Pero ¿quién ha dicho que es caro? ¿O que no tenemos tiempo? Gracias al coronavirus (no todo va a ser malo), hay mucha oferta de cursos on-line de todas las materias, y muchos son gratis (infórmate en el SEPE o en la Consejería de Empleo de tu Comunidad). Algunos tienen horarios flexibles, también los puede haber compatibles con tu horario de trabajo. Si al llegar el calor hemos aprendido a hacernos una página web, a pasar una entrevista en inglés o a negociar de forma efectiva, habrá sido tiempo ganado.


  1. Ahorrar. Cada vez que nos acordamos de eso, nos viene a la cabeza que estamos en paro, que tenemos una boda, o se nos estropea el coche o la lavadora, y… ¡adiós, muy buenas! Es buen propósito para año nuevo, pero no es un acto, sino una actitud. No es ponerse un objetivo, y abandonar al primer obstáculo, sino una serie de pequeños gestos. Me estoy planteando escribir un post específico para el ahorro, pero como apartado de unos propósitos, lo dejo en gestos cotidianos como preguntarse qué pasa si en vez de tomar café en la cafetería de al lado del trabajo, me llevo el mío y me lo hago en la cocina (si la hay y lo puedo hacer). O tomar vino en vez de copas. O ir andando adonde no se tarde más de 30 minutos. Todo suma. 


Dicho esto, ratillas, ¿qué os habéis propuesto para este año? Como aún es pronto, ya lo pensaréis. Ahora, a brindar con quien podamos, y a escribir la carta a los Reyes. ¿Qué les vais a pedir? Yo les doy todo el año para poder hacer un fiestón al aire libre (si es en verano, mucho mejor), sin límite de personas, sin toque de queda, y que no falte el rock.



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