MI PRESUPUESTO

¡Hola, ratillas! ¿Cómo estáis? ¿Habéis sobrevivido al turrón, cava, cenas, regalos y compromisos? ¿Y vuestra cuenta? Seguro que sí, pero ahora es tiempo de ir recuperándola, a base de pequeños gestos. Muchos de vosotros os habéis propuesto ahorrar. ¿Estáis buscando consejos? Venga, que no los necesitáis. Lo que necesitáis es haceros preguntas.

¿Para qué quiero ahorrar? Me han venido a la cabeza unos apuntes ya fósiles de Economía de la Facultad, donde decían que se ahorraba por tres motivos. ¿Cuál es el tuyo?

1.       Transacción. ¿Te vas a comprar un coche? ¿Una moto? ¿O el viaje de tu vida?

2.       Precaución. ¿Está el ambiente raro en tu curro? ¿Te preocupa tu futuro?

3.       Especulación. Aquí, me atrevo a decir que me gusta más la palabra “inversión”. Porque lo que quieres es obtener ingresos a partir de lo que has ahorrado, bien comprando un piso o montando una empresa, o bien comprando acciones, aunque no des un pelotazo con ello.

Sea cual sea tu motivo, no lo pierdas de vista. Ahorrar es un cambio de hábitos, se prolonga en el tiempo, y os va a poner mil veces a prueba. Nadie dice que sea fácil, pero… no es lo contrario de vivir.

Y ahora, pasemos a la acción. Hagamos un presupuesto. Vamos a ayudarnos de Excel, de Fintonic, o de las aplicaciones que tienen casi todos los bancos para ayudar a ahorrar. Yo lo hago en un Excel, tú como quieras.

La primera pestaña es la situación de la que partimos: primera nómina del año (enero).

En la columna “Ingresos”, lo que ingresamos en ese mes. Puede haber varias filas de ingresos (regalos, venta de mis patines, arreglo del PC del vecino…)

En “Gastos”, ponemos las partidas en las que gastamos el mes pasado. Aunque sean de un mes pasado, son un dato real que nos ayudará a hacer la estimación o previsión de lo que vamos a gastar este nuevo mes.

En mayúsculas están las partidas fijas. No podemos subirnos el sueldo (solo en sentido literal, jeje), ni bajar el precio del abono transporte. No quiere decir que sean inamovibles (podemos cambiar de trabajo o de gimnasio), pero no son como la ropa, que somos (casi) el 100% libres de no gastar en eso algún mes, si así lo decidimos.

 

 INGRESOS

 GASTOS (DIC)

PREVISIÓN

GASTOS (ENE)

NÓMINA

1.200,00 €

 

 

 

Regalos recibidos

200,00 €

 

 

 

ALQUILER HABITACIÓN

 

300,00 €

300,00 €

300,00 €

TRANSPORTES

 

55,00 €

55,00 €

60,00 €

Supermercado

 

200,00 €

200,00 €

185 €

Ropa

 

200,00 €

50,00 €

30 €

Regalos

 

200,00 €

0,00 €

20 €

Salir (restaurantes, cines, conciertos…)

 

250,00 €

200,00 €

225 €

GIMNASIO

 

30,00 €

30,00 €

30 €

MÓVIL

 

60,00 €

60,00 €

60 €

 

SALDO

105,00 €

505,00 €

490 €

 

Como podemos ver, el ejemplo es de un ratilla. Dentro de unos meses será de pro si no pierde de vista su objetivo, y hace de cada decisión una reducción en sus partidas de gasto, si el objetivo principal es ahorrar. El mes pasado le sobraron 105€, que podrían ser un billete de bus/tren a su tierra, entendiendo que no tiene coche. Comparte piso en Madrid, es profesional “junior”, y no tiene coche. Ahorra para poder comprárselo si no ha cambiado de opinión con el post Mi carro, que publiqué hace varias semanas.

En estos tiempos convulsos, uno debe ser cauto a la hora de cambiar de trabajo o de piso, aunque nunca se sabe. A río revuelto, ganancia de pescadores.

Ojo con el súper. Si esos 200€ son lo que gasta una sola persona en un solo mes en comida, hay que mirar qué compra. En otro post hablaré específicamente de este gasto, pero aquí resumo diciendo que se puede reducir, y mucho. Frescos frente a cocinados, marcas blancas y formatos grandes en productos duraderos son aliados.

En cuanto a la ropa, un ratilla de pro tiene una oportunidad de oro para ahorrar, entendiendo que si gastó en diciembre 200€, mucho no podrá necesitar. Pero ponemos 50€ por si se concede un auto-premio por bajar peso, dejar de fumar o reducir la partida de salir. También puede aprovechar las rebajas para hacer fondo de armario (entonces ponemos unos 100€).

Regalos: Seguro que este mes tendrás algún cumpleaños, pero nada comparable a diciembre. Pasamos de 200€ a 0€, pero aunque luego sean 30€, ya lo notarás. Bola extra: como son rebajas, puedes comprar un regalo mejor con 30€… o quedar igual de bien con 15-20€. Tú decides.

Salir: Indudablemente, diciembre es un mes de mucho gasto en salidas. Y enero, el mejor para reducirlo. Vuelve la liga, y empiezan nuevas series. Hace malo, y a veces se pasa mejor en una partida de Fortnite con los dos amigos de siempre. El verano empieza en enero, y de nuestra disciplina depende que podamos ir a la India, o nos toque tomar el sol en el Retiro, salvo que tengamos familia con casa en el pueblo. Una pregunta, ¿tú por qué sales? Porque si es para conocer gente nueva, no te puedo convencer así. En ese caso, reconsidera recortar de otras partidas… o cambiar de garitos. Que hay mucha diferencia de unos a otros. Ahí lo dejo.

Gimnasio: Este ratilla del ejemplo va con regularidad (o al menos, paga). Si va de verdad, OK, pero si no, se puede ir planteando dejar de pagarlo. Hay gente que va al gimnasio a socializar (lo entiendo, es sano, y no en todos los curros la gente es sociable). Pero si es a entrenar, y sin máquinas, hay muchos canales en Youtube para hacerlo en el salón, sin chocar con el de al lado, y ahorrando esos 30€ para la peluquería, que hasta ahora no nos permitíamos que tuviera su propia partida.

Al final, en enero tenemos 200€ menos de ingresos, pero ahorramos 495€ frente a los 105€ de diciembre. Y casi llegamos a la estimación. Eso, para el mes que viene. Digan lo que digan… ¡nos hemos subido el sueldo!

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