27. Comidas veraniegas

 

¡Hola, ratillas! El verano es sol, playa, fiesta, noches interminables y días sin horarios. Y tentaciones de pecados capitales persiguiéndonos como si no hubiera un mañana: comida en el chiringuito, cañitas, paellas, tapitas y helados. Y si no, no es verano.

Me subo el sueldo no da consejos para tener la tripa plana, pero sí para dormir tranquilo sin preguntarse cómo fue posible ayer gastarse X en una comida.

Vamos con los tips. Si no, no pasa nada, deja de leer, pero ya te los dará tu cuñado. El que avisa no es traidor.

1. En tu nevera: Ten siempre productos frescos. Es tiempo de tomate y pimiento. Si has comprado muchos y están maduros, haz gazpacho. Y si no quieres gastar electricidad, haz una ensalada con los mismos ingredientes. También hay pepino, melón y sandía. Melocotón y albaricoque. Que no falten ensaladas cuando comas en casa. Entran muy bien después de tanto sol. Si estás en la costa, es temporada alta no solo de guiris, sino también de atún y sardinas. Como ya sabemos, lo de la zona, y en temporada, es cuando mejor está de calidad y precio. ¿Quién quiere cerezas en Navidad, con lo buenas que están ahora? Vale, las cerezas están un poquito caras, pero una V en medio las encarece más y no protestas, que te veo.


2. En la barbacoa: Como acabamos de decir, el atún y las sardinas están de temporada. En lonjas y mercados se pueden encontrar bien de precio madrugando un poquito, pero si eres un purista de la panceta y las costillas, esto tampoco es lo más caro. Y si eres vegano, el calabacín y la berenjena, también de esta época, están deliciosos a la brasa. También se puede hacer paella, y saldrá mucho más económica que si se encarga para llevar o para que te la traigan. Los chiringuitos de la playa, salvo contadas excepciones, no se la curran mucho, pero la cobran como si así fuera.


3. De chiringuitos: Después de la playa, es lo que pide el cuerpo: pescaítos fritos, cervecitas y sangría. Pero ojo, saben muy bien que son muy pocos los fuertes de espíritu que se resisten, y donde más clavan es justamente en lo que no les sale más caro a ellos. Y así nos llevamos esos sustos cuando no hemos pedido más que unas cervezas y una de ensaladilla. Un ratilla de pro va a preferir comer en casa, pero como no todo el mundo es de pro, se puede buscar garitos que no estén en primera línea de playa, para asustarse menos.


4. El mercadillo del pueblo: No está mal darse un garbeo, suelen traer productos de temporada y de la zona. Se puede hasta regatear. Merece la pena comprar a lo grande (sandías y melones grandes, cerezas por cajas). Y si no da tiempo a comérselo fresco, seguro que El Comidista o Arguiñano tienen recetas fantásticas de sopas frías o zumos de sandía y melón. Y con la fruta, mermelada, que luego dura.


5. Excepciones al “do it yourself”: Carlos Ríos, no leas esto. En vacaciones, nos perdonamos si no queremos cocinar. Las mayonesas, que están en todas partes, es preferible tomarlas de bote. Ya no solo por el precio, que es más económico que hacerlas en casa, sino porque es más seguro. Si hay que pasar mucho tiempo “sentado”, que sea en una tumbona. Y el guacamole también sale más barato comprado que hecho en casa. Y lo mismo con las tortillas de patata. Desde luego, nada como las caseras recién hechas, pero acaba saliendo más barato (no solo en tiempo) comprarlas.


6. Y por las noches, los gin-tonic y bebidas destiladas se disparan un poquito de precio, que hay que amortizar la licencia de la terraza. Si eres de los de “Una y nos vamos”, y lo cumples, ya eres algo ratilla. Pero los de pro prefieren cervecita, sangría y tinto de verano cuando lo que quieren es cerrar garitos con gafas de sol. 




Bola extra: No quiero buscarme un abogado por algún ofendidito que me denuncie por hablar del verano sin mencionar los helados. Abundando en lo susodicho, reserva espacio en tu congelador y… compra a lo grande (hay mucha variedad en tu supermercado, si los compras por cajas te salen mejor que en la heladería de uno en uno). O… DIY (Do It Yourself). En los chinos venden moldes para que te los hagas de palito. Las recetas, en tu página favorita.


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